Control Físico realizó visita al Parque de la Memoria Histórica tras recibir denuncias de la comunidad
La Secretaría de Control Físico visitó el Parque de la Memoria Histórica el sábado anterior, donde evidenció, puestos de trabajo que no cumplen con protocolos de bioseguridad, atracciones mecánicas sin pólizas de seguro y comerciantes que no cuentan con permiso de aprovechamiento del espacio público.
«La visita se hizo a raíz de las solicitudes de ediles y presidentes de Juntas de la comuna Seis; es un lugar que nos genera muchas preocupaciones y por eso intervenimos de manera conjunta con las secretarías de Movilidad, Salud y Medio Ambiente, así como con la Policía Metropolitana de Villavicencio”, señaló la secretaria de Control Físico, Diana Herrera.
La funcionaria aseguró, “lo que logramos identificar es que ninguna de las personas que estaban allí contaban con un permiso, han venido invadiendo de manera indiscriminada el espacio público y generando unas consecuencias lesivas para la comunidad que los rodea”.
Según la secretaria de Control Físico, “es un parque diseñado para hacer un ejercicio de memoria y de reivindicación simbólica de los derechos de las personas que han sido víctimas del conflicto armado y que hoy está convertido en un parque de diversiones, y además gran parte de las personas que están allí no presentaron pólizas de riesgos por las actividades que de allí se deriven”.Una de las acciones ejecutadas, fue la inmovilización del cabezote de un tren de atracciones que recorría el barrio.
La funcionaria también explicó, si bien el parque no ha sido entregado al municipio pero está en manos de la Gobernación del Meta, y se va a iniciar con los comerciantes informales un trabajo que permita llegar a compromisos serios para el beneficio de la comunidad.
Para finalizar, hizo un llamado a los padres de familia para que no lleven a sus hijos a lugares que no garanticen las medidas mínimas de cuidado y bioseguridad. “Es un llamado a la responsabilidad de ellos, que nos ayuden porque, así como se están tomando medidas para que los menores no se arriesguen regresando a las aulas, que los padres no sean quienes los expongan a un riesgo llevándolos a estos lugares que no cumplen con las condiciones para prestar un servicio adecuado”.